domingo, 23 de mayo de 2010

Working Class Heroes (I)


En las diez primeras Copas de Europa del Siglo XXI (de 2001 a 2010, que es cuando acaba la década), tres han sido para equipos italianos (Milán '03 y '07, Inter '10), tres para equipos españoles (Madrid '02, Barcelona '06 y '09), dos para ingleses (Liverpool '05, Manchester ´07), una para un alemán (Bayern '01) y otra para un portugués (Oporto '04). Manchester, Madrid, Barcelona y Milán habían ganado mínimo un título durante la década anterior (en el caso de Madrid y Milán, dos cada uno) y ninguno de ellos era la primera ocasión en que se coronaba. De hecho, Real Madrid (9), Milán (7), Liverpool (5) y Bayern (4) son los cuatro equipos que más veces se han coronado campeones continentales. Los finalistas más exóticos han sido el Valencia (que perdió la última final del Siglo XX, en '00 contra el Madrid, y la primera del XXI, en '01 contra el Bayern) y el Mónaco, en ese accidente cósmico que fue la final de 2004.

La década de los ´90 del siglo pasado empezó con tres campeones novatos: Estrella Roja ('91), Barcelona ('92) y Olympique de Marsella ('93). En el caso del primera y el tercero, era la primera vez que equipos de sus países ganaban la máxima competición continental. Durante la década de los '00 (digamos) hemos tenido una final italiana (Milán-Juventus, 2003) y otra inglesa (Manchester-Chelsea, 2008), ambas resueltas por penaltis. La última final de los '90, ya mencionada, fue la del Real Madrid-Valencia. Exceptuando la de 2004, el también mencionado Oporto-Mónaco, con un equipo portugués y otro francés, el resto se han resuelto entre alemanes, españoles, ingleses e italianos (los ingleses tienen el record, con presencia en cinco finales, por cuatro de españoles y tres para alemanes e italianos).

Si nos vamos a semifinales, la cosa se pone aún peor. El Olympique de Lyon y el PSV Eindhoven son los únicos que se salen de las cuatro grandes ligas, y Villarreal, Deportivo de la Coruña, Chelsea y Lyon han sido los únicos "debutantes" en la ronda. En tres ocasiones, además seguidas, tres equipos ingleses han copado la ronda (`07, `08 y `09). En `03 los italianos hicieron los propio, en `00 lo habían hecho los españoles. Las de 2004, de nuevo, fueron las más democráticas, con cada semifinalista de una nacionalidad distintas y tres "principiantes" que nunca habían llegado tan lejos, Deportivo, Mónaco y Chelsea. Eso sí, el único "veterano", el Oporto, fue el que se proclamó campeón. Entre los entrenadores, menos Ancelotti (Milán), Benítez (Liverpool), Guardiola (Barcelona), Mourinho (Oporto e Inter) y Rijkaard (Barcelona) la ganaban por primera vez, pero Ancelotti y Mourinho lo hicieron dos veces (Del Bosque con el Madrid, Hitzfield con el Bayern, Ferguson con el Manchester, hacían todos la segunda). En los casos de Ancelotti, Rijkaard y Guardiola, ya la habían ganado como jugadores. Los dos primeros, dos veces, juntos, con el Milán, en el '89 y el '90.

La UEFA (ahora Europa League, antes Copa de Ferias) ha sido mucho más democrática, que para algo es la copa de las "clases medias". Ha visto, en estos diez años, siete campeones "novatos": Oporto'03 (que al año siguiente ganó la Champions), Valencia'04 (que venía de perder dos finales de la máxima competición), Sevilla '06 (que repitió al año siguiente), CSKA de Moscú '05 (el primer equipo ruso en coronarse continentalmente), Zenith de San Petesburgo '08 (el segundo), Shaktar Donetsk '09 (el primer ucraniano) y Atlético de Madrid '10. Liverpool en 2001 (campeón de Europa un par de años después) y Feyenoord en 2002 conseguían su tercer y segundo título, respectivamente. España se ha llevado la palma con cuatro campeonatos más dos finalistas (el Deportivo Alavés en ´01 y el Español  y su mala pata en '07). Después, Rusia con dos, y uno para Inglaterra, Holanda, Portugal y Ucrania, el primer y único país nacido de la caída del telón de acero capaz de tener presencia internacional (si consideramos que Rusia y República Checa son considerados por FIFA y UEFA "herederos estadísticos" de la URSS y Checoslovaquia, respectivamente).


Sin duda, el Alavés, actualmente en Tercera División tras encandenar una serie de descensos incomprensibles (o demasiado comprensibles, en una palabra: Piterman), ha sido el finalista más exótico. Detrás va el Middlebrough inglés, que se batirá el cobre un año más en la Championship tras no poder ascender esta temporada. Los dos grandes de Escocia, Celtic y Rangers, han perdido sendas finales. Otros ilustres, como el Sporting de Lisboa o, ay, el Olympique de Marsella, también han sufrido lo suyo. El Fulham ha sumado un finalista más a la traidición inglesa, la liga con más campeones diferentes de todas las competiciones europeas, incluyendo un Nottingham Forest que anda también en la Championship y hasta no hace tanto presumía del doble de Copas de Europa que el Barcelona. Un pasteleo de las ligas más potentes en el que Grecia y Turquía no han pasado de espejismo. Y rusos y ucranianos tedrán que mantenerse en el tiempo para demostrar algo más.

Si nos vamos a los campeonatos locales, la Liga española ha visto tres campeones en diez años: Real Madrid con 4 ('01, '03, '07 y '08), Barcelona  con otro 4 ('05, '06, '09 y '10) y Valencia  con 2 ('02 y '04). La Premier, otros tres: Manchester con 5 ('01, '03, '07, '08 y '09), Chelsea con 3 ('05, '06 y '10) y Arsenal con dos ('02 y '04). En la Seria A italiana, cuatro campeones se han repartido sólo nueve títulos, al quedar la temporada 2004-2005 desierta por el 'Moggigate': Inter con 5 ('06, '07, '08, '09 y '10), Juventus con dos (´02 y '03, el '06 pasó al segundo por el escándalo de marras, y el '05 quedó desierto), Milán ('04) y Roma ('01). Más repartida, como siempre, la Bundesliga alemana, donde hasta cinco equipos levantaron la ensaladera, aunque el único en repetir fue el Bayern de Munich, con 6 (´01, ´03, ´05, ´06, ´08 y ´10), conformándose con uno cada uno Borussia Dormunt (´02), Werder Bremen ('04), Sttutgart ('07) y Wolfsburgo ('09), este último uno de esos milagros que le alegran a uno la vida. En Francia, la cosa es aún peor, cuatro campeones, pero siete trofeos para el Lyon (´02 a ´08), con uno para Nantes (´01), Burdeos ('09) y Olympique de Marsella ('10), de una vez por todas, y con Deschamps en el banquillo, como siempre debió ser. En Portugal, seis para el Oporto ('03, '04, '06, '07, '08 y '09), dos para el Benfica ('05 y '10) y uno para Sporting ('02) y Boavista ('01).


Todo esto nos deja, a nivel de clubs europeos, un balance en el cuál, entre los "grandes", sólo han irrumpido, en esta década, con más o menos acierto, Chelsea, Lyon, Oporto, Sevilla y Valencia. El Leverkusen lo excluyo porque fue flor de una temporada, tras fagocitarlo el Bayern, y ni siquiera llegó a ganar un mísero título. El método de "irrupción" del Chelsea fue ser comprado por un magnate ruso del petroleo, lo cual, para una liga como la inglesa, y recordando al Nottingham Forest de final de los '70 del siglo pasado, que ganó dos Copas de Europa sin un sólo extranjero en la alineación y, básicamente, por los cojones de Brian Clough, es de vergüenza, si me permiten el exabrupto. El Oporto lo pongo por el título continental logrado, pero tras la marcha de Mourinho (y Deco), retornó a la mediocridad de la Liga Sagres. Sevilla y Valencia, ay, y no me puede la pasión, tienen más mérito, aunque los chés van camino de seguir al Deportivo de la Coruña y retroceder 20 años deportiva y societariamente, y a los sevillista la economía (ya sea para comprar jugadores o árbitros) nunca les va a permitir pasar del tercer puesto en Liga y los cuartos en Champions. Si no, al tiempo. En cuanto al Lyon, las semis de la Copa de Europa las merecía hace tiempo, pero sus siete años de reinado del terror en Francia perjudicaron, y mucho, la competitividad de la liga gala. Gracias sean dadas al Burdeos de Blanc y el Marsella de Deschamps. Por cierto, los dos capitanes de la Francia del '98.

Si retornamos a lo general, en los Mundiales de Fútbol, los últimos tres campeones "nuevos", Inglaterra en 1966, Argentina en 1978 y Francia en 1998, ganaron en casa. De hecho, sólo dos campeones no se han estrenado como locales en toda la historia, Alemania en 1954 y Brasil en 1958. Estos últimos, los pentacampeones, son los únicos que no han ganado nunca "en casa" -perdieron el célebre 'Maracanazo' del '50 contra Uruguay-, aunque la FIFA ya trabaja en arreglar eso en 2014. Uruguay en 1930 e Italia en 1934 ganaron los dos primeros mundiales en casa, para completar una terna de cuatro europeos con nueve títulos y tres americanos con otros nueve en la que sólo Brasil ha ganado fuera de su continente, en Suecia 1958 y Corea-Japón 2002, el tongazo más grande jamás jugado con permiso de Italia 1934 y, por supuesto, Inglaterra 1966.

De las tres competiciones continentales con un mínimo de competitividad, Eurocopa, Copa América y Copa África, la primera ha sido, sin duda, la más igualada en los últimos 20 años. O más. Para empezar, porque en toda su historia sólo tres países han repetido trofeo: Alemania (1972, 1980, 1996), España (1964 y 2008) y Francia (1984 y 2000). En 2004 ganó Grecia, paladeen el concepto, y en 1992, Dinamarca, que se clasificó al quedarse fuera Yugoslavia a causa de la Guerra de los Balcanes. En 1988 había ganado Holanda, y tiene trofeos Italia (1968), Rusia (en 1960, como la URSS) y República Checa (1976, como Checoslovaquia). Desde que la Copa América se juega a sede fija, 1987, Brasil ha ganado 5 (cuatro de las cinco últimas desde 1997), Argentina 2, Uruguay 2 (una en casa en 1995) y la restante, Colombia, en 2001, como anfitriona. En el mismo tiempo, desde 1988, Egipto ha ganado cuatro Copas de África (las tres últimas seguidas), Camerún tres, Costa de Marfil y Nigeria una cada uno, y el resto Argelia, Sudáfrica y Túnez como anfitrionas.

Por si no se nota por el tono empleado, lo voy a dejar claro: el único campeonato de selecciones en el que ser el anfitrión no ha contado doble en los últimos 20 años ha sido la Eurocopa. Desde el 84 no gana el que juega en casa, entonces la Francia de Platini. En los casos de Dinamarca, Grecia y, seamos honestos, la España de 2008, el campeón ni siquiera partía como favorito. En África, sin embargo, Egipto ha mantanido la última década un reinado del terror impresionante (también a nivel de clubs), y los campeones debutantes desde el '90 han sido todos anfitriones (Argelia, Sudáfrica, Túnez) con la honrosa excepción de Costa de Marfil, que lo extraño es que no tenga ningún título más. En América, poco que decir. Brasil hace lo que quiere, y el campeonato de 2001 estuvo diseñado para que lo ganase, sí o sí, Colombia, y pilló a los brasileiros en horas muy bajas.


Que al año siguiente ganasen el Mundial sólo demuestra, un poco más, el tongazo morrocotudo que fue Corea-Japón'02, con la FIFA pasteleando en toda su gloria, y probablemente Blatter corriéndose de gusto sólo con pensar en ese Alemania-Brasil que también le quedó en la final y que, si por él fuese, se repetiría todos los años. Por el camino, los árbitros apartaron a Portugal, Italia y España (no se engañen, fueron los árbitros y nadie más que los árbitros), y Argentina, Inglaterra y Francia se hicieron el harakiri alegremente. Los británicos, por su método tradicional, que España sólo consigue imitar pálidamente: cantada espectacular del portero (en este caso Seaman) y las estrellas borrándose en el primer partido difícil (el de Brasil, que se paseó hasta la final con un sorteo tan favorable que no sé como no se le cayó a nadie la cara de vergüenza: Turquía, Costa Rica y China en primera ronda, Bélgica en octavos, los ingleses en cuartos y de nuevo Turquía en semis). Brasil ha tenido siempre a los mejores delanteros del mundo (Romario, Ronaldo, Rivaldo, Ronaldinho), pero ha jugado andando y como el puto culo. En 1994 el doble pivote eran Dunga y Mauro Silva, y la final, contra Italia, la ganaron por penaltis. En 2002, Kléberson y Gilberto Silva comandaban el tema, con Edmílson de guardaespaldas. Para echarse a llorar.

Por mis pistolas que no me puede la pasión, he visto mejor fútbol en las Eurocopas desde 2000 que en todos los mundiales desde Italia' 90 que tengo memoria. En concreto, entre Holanda siempre, República Checa en 2004 y España y Rusia en 2008, me basta para el resto de mi vida. Argentina en 2006 me hizo esperanzarme, pero fue lo de siempre desde que se fue Maradona: caquita en el primer partido difícil, y a casa. Alemania es efectiva, y eso es decir mucho pero no decir nada. Y los africanos, aún espero que exploten. Ghana y Costa de Márfil son mi esperanza de que a la FIFA no le haga falta un tongazo, porque en África el personal es más solidario y, si no pasa el anfitrión (Sudáfrica es una banda y el peor de su grupo con mucha diferencia, pero mucha), apoyaran a cualquier vecino, por lejano que sea. Tengo el sueño húmedo de una semifinal España-México, pero no pasa de ser eso.

¿Qué quiere decir este despliegue estadístico-conspiranoico? Quiere decir que el fútbol, al menos para mí, está perdiendo la gracia a una velocidad alarmante. Y en el siguiente post, más detalles.

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